Zoonosis: un tema que el campo tiene que cuidar.
26/07/2014
Son las enfermedades comunes al hombre y a los animales, que suelen afectar a las personas más pobres. En la Exposición Rural de Palermo hubo lugar para poder analizarlo.
Las zoonosis constituyen un grupo de enfermedades comunes al hombre y a los animales. Pueden ser de transmisión directa -a través de algún fluido corporal como orina o saliva- o de transmisión mediada, a través de un insecto. También pueden ser contraídas por consumo de alimentos de origen animal que no cientan con los controles sanitarios necesarios, o por consumo de frutas y verduras crudas mal lavadas.
Brucelosis, fiebre amarilla, fiebre hemorrágica argentina, gripe aviar, hidatidosis, hantavirus, leptospirosis, rabia, sarna, síndrome urémico hemolítico, toxoplasmosis, triquinosis y tuberculosis bovina son algunas de las zoonosis que se encuentran en el país.
Varias de ellas se enmarcan dentro de las enfermedades desatendidas. Existe un conjunto de zoonosis que afecta a las poblaciones más vulnerables, con bajos ingresos, en viviendas precarias, sin acceso a servicios básicos como agua potable o redes cloacales y con bajo nivel educativo. Se las conoce como generadoras de pobreza por su impacto negativo en la salud y sus consecuencias significativas sobre la capacidad de trabajo de los afectados.
Silvia Gold, presidenta de la Fundación Mundo Sano, señaló que "son enfermedades que afectan a poblaciones pobres, y lo que determina su condición de injustas, fundamentalmente, es que pueden ser evitadas".
Para la atención de la salud respecto de estas enfermedades, lo más importante es actuar preventivamente en tres niveles: proteger la salud humana, proteger la salud animal (de los animales de producción, compañía y fauna silvestre beneficiosa) y cuidar el ambiente de residencia habitual o de trabajo.
La Fundación Mundo Sano, que presentó un trabajo al respecto en La Rural con el apoyo de Biogénesis Bagó, tiene varios programas de hidatidosis, una zoonosis presente en zonas rurales que puede afectar gravemente al ser humano y hasta causarle la muerte, en especial a quienes se dedican a la ganadería.
En la Argentina se estima que hay cerca de 4 millones de habitantes rurales en riego potencial de contraer la enfermedad, provocada por un parásito que se aloja en el intestino delgado de los perros y produce quistes en órganos y tejidos del hombre, entre ellos hígado, pulmón y corazón.
La enfermedad se origina en el hábito de alimentar a los perros con vísceras crudas -o mal cocidas- provenientes de pequeños rumiantes o de cerdos faenados domésticamente.
Fuente: Clarín Rural, 26/07/2014